Hoy mismo he tenido la ocasión de asistir al acto solemne de entrega de los diplomas a los nuevos doctores que terminaron el año pasado en la UMH de Elche. Entre estos se encuentra el molt il·lustríssim Francisco Camps al que dediqué una entrada hace casi ya un año precisamente por este mismo menester. Sin embargo, al acto de hoy no ha asistido. No se ha atrevido, sabía que si venía habría gritos, camisetas, pancartas y mucho desprecio.
Sin duda, José Ignacio Wert es el ministro que más ha dado que hablar, que más gente ha conseguido poner de acuerdo en su contra y más se ha insultado en las redes sociales. La realpolitik que ha dirigido Wert contra su propia población, especialmente en Educación, empieza a tener ya víctimas. Profesores que saben que éste será su último mes de trabajo, alumnos que hacen cuentas para ver cómo lo harán para pagar sus carreras, manifestaciones y protestas silenciadas o minimizadas por la clase política y los medios… A grandes rasgos, todos tenemos claro lo que está pasando y nos afecta en mayor o menor medida, pero ¿cual es la realidad de las víctimas? ¿cómo lo están viviendo los directamente implicados?